La escalera del amor es una metáfora para decir, que amar es algo que no nacemos sabiendo. A amar se aprende amando. La escalera del amor es para subir. Aunque claro, si bajamos… Tenemos un problema. Y también los de nuestro alrededor. La causa del narcisismo, es una falta de amor y conciencia. No se diferencia lo que está bien de lo que está mal. Si las personas no tenemos ejemplos vivos, de personas que saben amar, es fácil perderse.
Nacemos desprovistos y necesitados en todas las dimensiones.
La primera escuela de amor, es la relación con nuestra madre, en su vientre. Grabamos emocionalmente, el amor, la aceptación o el rechazo, la agitación o tristeza, la ternura o alegría.
Y por extensión la familia, los padres, las personas que directamente te cuidan a diario. El padre ocupa un lugar esencial.
El primer peldaño del amor, es ser recibido con amor.
El segundo peldaño del amor es ser atendido en las necesidades de afecto verdadero, no solo los cuidados normales de higiene, sueño y comida. Un niño especialmente, necesita calidad de amor y cantidad de tiempo.
El tercer peldaño del amor, es poner límites. Las personas que nos quieren nos enseñan que no todo vale. Hay límites. Dejar que tu hijo se embote de dulce, por poner un ejemplo, no es amarlo. Dejar que tu hijo te grite no es amarlo, dejar que tu hijo pegue a sus hermanos sin corregirlo, no es amarlo, no son cosas de niños. Son cosas de niños a los que no se les ponen límites.
Las personas que nos aman nos ponen límites. El amor incondicional tiene límites. Los límites del propio amor.
El cuarto peldaño del amor, es aprender a ver el valor que es el otro, sus capacidades de ser, y admirarlo. Lo que no se conoce no se admira, lo que no se admira, no se ama.
El quinto peldaño es aprender a perdonar los errores, siempre es posible empezar de nuevo. Pero el otro, tiene que reconocer su error y estar dispuesto a cambiar y mejorar, sino no le servirá de nada la oportunidad.
Se puede seguir subiendo, en mil detalles, mil gestos…pero solo puede enseñar a amar quien lo ha aprendido. Se sube bajando…Es decir, cuanto más se afina, más se escucha, más se pone el acento en lo que hace crecer realmente.
Hay vidas rotas, lo ideal no es siempre es lo que sucede. Pero soy testigo de que quien quiere ser feliz y aprender a amar, lo consigue.
Siempre hay personas dispuestas a poner amor donde no hubo.
¿En qué encuentras tú dificultades para amar?.
