DIGNIDAD PERSONAL Y AMOR PROPIO

La dignidad personal y el amor propio,  están íntimamente relacionados. Ambos se basan en tomar conciencia de que nuestra valía personal, se basa en el amor propio. Por dignidad tomamos decisiones en nuestra vida que vayan a favorecer el desarrollo de nuestra valía. Nuestras capacidades humanas ayudan a humanizar los grupos humanos a los que pertenecemos.  La otra cara de la moneda, es el amor a los demás. Nadie da lo que no tiene para sí mismo. Es la clave más importante para ser feliz, dar lo mejor de uno mismo. Te podrían ayudar a hacerte estas preguntas y responderlas con honestidad. A veces respondemos más de cabeza, pero sin basarnos en nuestras vivencias reales. Si estas preguntas no te ayudan, o no sabes qué responder, no te preocupes. Al principio es así.

  1. ¿Cómo dirías que es tu autoestima?.
  2. ¿Qué necesitas mejorar?
  3. ¿Quién te ha ayudado a valorarte? ¿Cómo te lo ha enseñado?
  4. ¿Qué actos cotidianos realizas para luchar por tu dignidad personal.

Te invito a poner en práctica esta actitud para potenciar el  amor propio :  Mírate bonito (aprender a ver las cosas buenas que tienes). Esto es rápido de decir y difícil de vivir si no has tenido personas adecuadas en tu vida, ni relaciones auténticas de personas libres y felices. O simplemente, no te hicieron un buen reflejo de tu interior.

No es cuestión de saberse, sino de sentirse, abrazarse con los ojos de corazón. Mirarse ajustadamente, porque ni somos más que otros, ni somos menos. Eres tú, y estás haciendo un camino. Vivirse cada día, dignificando la propia vida, es como el trabajo de una hormiga. Paso a paso. Como decía Antonio Machado, caminante no hay camino, se hace camino al andar…Ser consciente de esto te hacer vivir en humildad, porque hoy puede ser que hayas acertado con la forma satisfactoria de expresarte y ser fiel a ti mismo. Pero mañana, puede ser que no sea así. Hoy puede ser que hayas podido decir con facilidad a los demás sí o no. Pero si mañana no puedes o se te hizo grande, no pasa nada. No lo olvides, comprenderte y tener paciencia, es hacer el camino.

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